Primeros resultados de una charla sobre astrologia en los jovenes de una escuela pública

Luego de la primera materialización del ideal, llegan las realidades a intervenir como efectos de las causas y ya la fantasía se hace a un lado para crear el campo de experimentación real, al que tener que criticar, corregir y aprender cómo continuar dandole forma.
Noté que no es necesario en alumnos de la secundaria, exigir, reprender, obligar, castigar, ni menos tomar examen o cuestionar sus oidos si estaban atentos o no, al menos en estas materias reflexivas, porque justamente el fin es estimular la libertad de pensamiento y análisis psicogenético  y permitirles el derecho a debatir, cuestionar o negar cualquier hipótesis expuesta y no impuesta. El interes personal era y es basicamente lograr fomentar la curiosidad por el autoconocimiento y ese es un camino individual que deberán recorrer con sus propias habilidades y capacidades.
Muchos alumnos de esa escuela pidieron hacerse una carta astral, siendo tan jóvenes, solo se los podía considerar como jóvenes que vivieron la primer oposición saturnina. El primer crítico estado de seudo madurez que les marcaría el ritmo de su noción de responsabilidad ante algúna situación que saturno hubiera manifestado en sus vidas. También la interpretación de la luna, el ascendente y la posición del Sol parece ser lo más importante por el momento. Evitando la futurización ni el estorbo de la predicción. Hacerles conocer el mecanismo básico de sus reacciones emocionales y egoicas.
Pero la luna parecía tener demasiada importancia, porque esos jóvenes, son los que atraviesan la epoca de las familias ensambladas, disfuncionales y con una presencia siempre femenina en su casa como máximo simbolismo de autoridad. Sin embargo Saturno también trascendía en la interpretación sobre sus propias limitaciones y frustraciones primeras.
Es muy importante destacar la luna de cada uno porque es la energía que hará tener registro de la presencia fenoménica de "una madre" y todo el proceso de "ser parte" de lo tribal en las escuelas, y de cómo se ajustan a esas experiencias. Siendo todos todavía niños, la luna tomaba todavía mucha trascendencia. Me enfoqué en considerar que lo más primordial es hacerles reflexionar acerca de que esa "madre" es proyección propia como para que no se sientan amenazados por una imagen externa de eso que es una emoción interna. Por ejemplo, chicas con Luna Aries, lidiaban atrosmente con la demanda de aquella mujer, sintiendo siempre de la imagen de la "madre" a una mujer que grita, demanda, impone, y genera un clima de violencia. Decían ser sumamente agresivas tanto ellas como todas las femeninas presencias, incluyendo el nido familiar total. Cada luna tiene sus resputsta anímica a un mundo emocional, que para todos parece devenir de un afuera, de una crianza "tipo" pero simplemente se trata de un caudal perceptivo interno de aquello que sucedía en lo externo.
Otros jóvenes me pedían saber qué libros leer, otros comenzaron a estudiar astrología y entonces noté que mi meta no era que los chicos fueran "astrologos" sino que la astrología sirviera como puente hacia otras búsquedas, una herramienta en donde ampararse para significar la unidad que son dentro de un todo.
Unos meses después, durante un debate en el centro de estudiantes, se hizo una propuesta de aportar qué otros talleres realizar para una próxima jornada. Algunos jóvenes pidieron nuevamente astrología y fui convocada nuevamente....................